En abril comienza a disfrutar de los fresones
Con la primeravera llegó el renacer de todo, pero también de frutas y verduras de temporada que son riquísimas para nuestro organismo y que no solo aportan vitaminas y minerales, sino también alegría porque dan variedad y color a nuestra dieta.
Pues bien, hoy queremos hablar de una de esas frutas que, aunque es posible que podáis encontrar durante todo el año, ahora es cuando maduran de manera más natural y saben, por lo tanto, mucho mejor.
Sus escasas calorías y su ligero efecto diurético les han dado fama de fruta depurativa. De hecho, al llegar la primavera algunas personas realizan con ellos una cura de varios días. Pero si son adecuados para depurar es sobre todo porque atesoran valiosos nutrientes.
Los fresones son casi tan ricos en vitamina C como la naranja: 100 gramos cubren toda la que se precisa al día. Esta vitamina mejora la asimilación de su hierro y se acompaña de vitamina K.
Al ser más grandes que las fresas, se prestan más a presentaciones en rodajas como un carpaccio de fruta. Corta las rodajas bien finas y alíñalas con unas gotas de vinagre de módena para acentuar su sabor.
El fresón es una de las frutas con mayor presencia de plaguicidas. Como no se pela, es especialmente importante elegirlos de cultivo ecológico. Y recuerda: cómpralos en su punto y consúmelos enseguida, pues se deterioran rápidamente una vez recolectados.
La mayoría de los que se encuentran en nuestro país proceden de Huelva. Otra zona conocida por sus buenos fresones es El Maresme.